Viaje fin de curso 2018
El pasado 2 de abril, todos los alumnos de 4 nos levantamos como todos los días pero con más ilusión… ¡ Nos íbamos de viaje de fin de curso! Consideramos que los recuerdos se mantienen mejor en la memoria, pero compartiremos una pequeña parte de nuestra experiencia con vosotros.
Todos madrugamos muchísimo y nos encontramos en la parada del autobús con una maleta llena de nervios e ilusión; rumbo a un viaje inolvidable donde más tarde conoceríamos a nuestros futuros compañeros (y amigos) de Montoro.
Tras muchas horas de bus, sueño y calor llegamos a nuestro destino, Segovia, donde visitamos la ciudad y el famoso Acueducto de Segovia, para más tarde, marchar camino Arriondas, Asturias. Al llegar al hotel, descubrimos que en el sótano había una discoteca, la famosa -1, donde conocimos a alumnos de otros centros de toda España. Esa misma noche, le gastamos una broma a nuestra querida compañera Alba, diciéndole que iríamos a la cena en pijama pero nadie apareció así… ¡Excepto ella!
Al día siguiente, a causa del mal tiempo, se canceló la actividad ´descenso del río Sella` y decidimos hacer paintball y, por la tarde, una actividad con tirolinas, pero sinceramente, no fue tan buena idea hacerla. Nuestra compañera Stefanía, presa del pánico, se quedó inmóvil cuando se disponía a hacer la última etapa del recorrido; tuvo que subir un compañero de Montoro para socorrerla. ¡Todo un héroe para ella! El Miércoles, visitamos Oviedo, también conocida como Vetusta, ciudad donde sucedió la trama de la obra La Regenta de Leopoldo Alas Clarín (¡Qué pesao el maestro José Antonio!). Por la tarde, visitamos los famosos Lagos de Covadonga, donde el tiempo no estuvo a nuestro favor a causa de la lluvia e incluso granizo… Más tarde, de madrugada, decidimos visitar el hotel todos juntos, pero… ¡Se produjo una avalancha! Fue un caos, todos gritábamos y corríamos hacia nuestra habitación.
La mañana siguiente, tuvimos que madrugar para poder visitar Madrid. En el autobús nos quedamos dormidos, momento que aprovecharon los profesores para gastarnos una broma echándonos fotografías. Al llegar a Madrid, visitamos la capital, fuimos a comer a un buffet, situado en Gran Vía, donde después de tantos días pudimos tener un satisfactorio almuerzo; al anochecer fuimos a un centro comercial para más tarde ir al hotel a descansar.
El ultimo día, fuimos al Parque Warner, donde estuvimos el día entero montándonos en las atracciones. Pero, desafortunadamente, la atracción más famosa conocida como “Superman” se averió justo en el momento que íbamos a subirnos, esperando 45 minutos en la fila. Por la tarde, volvimos a Córdoba y llegamos por la noche, en ese momento nos despedimos de nuestros compañeros de Montoro que tras el viaje, se han convertido en muy buenos amigos
Ha sido una experiencia magnífica que jamás olvidaremos; en nuestra opinión, el mejor viaje de nuestras vidas.
Marisol Agüera y Estefania Marín
